Coloca el auricular horizontalmente en un tornillo de banco con protección de goma o un par de alicates sin filo.

Aplica presión constante y uniforme a cada lado del auricular a lo largo de la articulación principal de la carcasa (la articulación indicada por las dos flechas). La presión debería abrirlo.

Presiona lo suficiente para crear un pequeño espacio entre las dos mitades del auricular. Si está usando un par de alicates, coloque un trozo de tela entre los alicates y los auriculares para evitar que los dientes dañen el plástico blando.