Para este paso, se recomienda usar una pistola de aire caliente o un secador de pelo para ablandar el adhesivo que fija el ensamblaje del micrófono a la carcasa superior. Es posible que puedas retirarlo sin hacerlo, pero correrás el riesgo de dañar el cable del micrófono.

Con la pistola de aire caliente a baja temperatura, calienta el ensamblaje del micrófono para aflojar el adhesivo que lo fija a la carcasa superior.

Ten mucho cuidado de no sobrecalentar los micrófonos ni la carcasa superior. Ten en cuenta que el teclado de plástico está en el otro lado: demasiado calor en un solo lugar puede fundir las teclas.