Si la cantidad y los tipos de tornillos utilizados son relativamente pequeños (menos de tres) y se pueden distinguir fácilmente. Entonces no hay necesidad de clasificarlos, solo guárdelos adecuadamente.

Es mejor no colocar el tornillo sobre una superficie lisa o el borde de una mesa, donde el tornillo podría rodar en todas las direcciones con un solo estornudo o una ráfaga de viento fuera de la ventana.

Poner los tornillos en telas arrugadas (como suéteres) es una buena opción

No pongas tornillos en las cosas que podrías mover, como la caja de destornilladores o la parte posterior del ordenador portátil que acabas de quitar. De lo contrario, cuando abras la caja del destornillador para encontrar el destornillador y te prepares para volver a colocar el panel posterior en el ordenador, los tornillos rodarán hasta el suelo.

No mantengas el tornillo al alcance de tu brazo, o un movimiento involuntario del brazo llevará el tornillo al suelo.

Puedes colocar los tornillos temporalmente en el cajón debajo de la mesa, o en el estante sobre la mesa que necesita levantarse un poco para alcanzar, o en un lugar lejos de tus manos

No quites los tornillos de objetos con muchas ranuras, como un sofá, un tornillo pequeño será difícil de recuperar si cae en la ranura del sofá.

Si un tornillo rueda accidentalmente hasta el suelo, es más eficiente usar un imán para atraerlo que usar los ojos para encontrarlo. Recuerda cuidadosamente el sonido y la dirección del aterrizaje del tornillo, y podrás encontrar el tornillo más rápido